12.12.2006

La tristeza del transporte público

La tristeza de mi vida me ha obligado esta última temporada el penoso transporte público. Lo califico de penoso ya no por el estado de los vehículos que más bien parecen sacados de un desguace abandonado en plena Guerra Civil, si no por los especímenes que lo frecuentan. Lo más variado de la raza humana se reune dentro de esa raza arcaica de autobuses, desde malotes, pijos, ricos, pobres, pobres con complejo de ricos, ricos con complejo de dioses... Pero hay una persona que me llama especialmente la atención: la niña pija con postura de entrepierna.

Es una especie especial de niña pija rubia pero con varios aspectos que no concuerdan con su subespecie. Hay que decir que sigue a raja tabla una especie de ritual extraño. Se sienta siempre en el mismo asiento, es decir en el asiento paralelo al que me siento yo. Es matemático, siente donde me siente ella siempre en paralelo (comprobado empiricamente). A continuación saca su MUVO (mr) y pone sus canciones favoritas para escucharlas mientras las murmura, mirando siempre hacia el mismo lado. Pero lo que más me impresiona es su postura. Siempre lleva una mano entre las piernas. Los hombres que conducen sabrán a que postura me refiero (mano en volante, la otra donde caiga). Esto me hace reflexionar sobre la personalidad de cada uno. Una niña pija y bien con manicura de todos los dias, pelo rubio perfectamente peinado, labios cuidados no puede permitirse el descuido de tener esa postura tan vulgar, aunque grandiosamente provocativa.

No se como se llama, ni si estudia o trabaja, francamente no quiero hablar ni tratar con ella, no quiero que se me vaya un mito al garete.

1 comentario:

Unknown dijo...

A tí lo que te pasa es que te pone esa chica... que es una niña por dios!!! controleseme un poco :P